Gracias viejita por cuidarme más allá de la vida. Eres la mejor. Te quiero ahora y siempre. Mi cariño por ti no se apagará.â€De las generaciones de las rosas que en el fondo del tiempo se han perdido quiero que una se salve del olvido, una sin marca o signo entre las cosas que fueron. El destino me depara este don de nombrar por ve
Los cartas de amor Diarios
Luego estaba el otro Lou, el que cantaba con ternura a la princesa en la colina y a la edén del amor, veÃa belleza en la escoria y anhelaba trascendencia en esa fina dirección que separa a veces placer y dolor. Con palabras simples pero certeras, áspero humor de urbanita emocionalmente acorazado, romanticismo de vieja escuela y tajante